Anillo de plata

-Llegas tarde, como siempre, por si acaso ya no iremos a ningún lado, ya es tarde ya van a cerrar y a esta hora es peligroso-

-Lo siento, el carro demoró, aun podemos ir no es tan tarde- (no hay arrepentimiento en mi "lo siento")

-Dijiste que a las 7 vendrías, ya van a ser casi las 8. No, ya fue. No saldremos.-

-Vamos. Compramos y venimos, es tan simple, no se porque tienes que complicar las cosas-

-¿Te importa muy poco no?-

-¿Porque siempre tienes que decirme lo mismo?, si me importa, solo que tuve problemas para venir, vamos ahora, en lugar de estar discutiendo podemos ir y venir-

-No, ya no-

-¿Entonces para que he venido?-

-Si quieres irte, vete-

-¿Es en serio?, mañana es nuestro aniversario, entonces ¿ya fueron todos los planes?- (gradualmente me invade la cólera)

-Si,ya fueron-

(Me acerco, trato de calmarme, de efectuar un movimiento cariñoso) -Lo siento, tuve la culpa, no es que no me importe, aun hay tiempo, solo que estas encolerizada y por eso no quieres hacer nada-

-Odio tu impuntualidad- (parecen llamas las que habitan tus ojos)

(evito hablar por unos segundos) -no quería que esto fuera así, vamos de una vez, cálmate-

-¿no entiendes que no?, es peligroso a esta hora-

-lo siento, pero no quiero estar así, me hace daño sentir ira, pelear, no quiero explotar como antes, solo quiero estar bien, sin tener que pasar por ese estado, no quiero que me duela la cabeza- (tergiversas mis palabras, crees que te dije "eres un dolor de cabeza")

-entonces vete, vete-

-no me hables así, no tienes porque, déjate de esas cosas y vamos de una vez, poco a poco te calmarás-

-siento que has cambiado, eres otra persona- (lo traduzco a "ya no me amas")

-es que no quiero sentirme mal, como siempre lo hacía, quiero que estemos bien- (deseo que lo traduzcas a "te amo, y tus cóleras me alejan de ti") -vamos por favor-

-ya te e dicho que es peligroso-

-Entonces di la verdad, que no te sientes segura conmigo- (la cólera por no poder hacerte cambiar de opinión se hizo imposible de disimular, mi rostro ya esta tenso, mis músculos faciales como una piedra)

-No, no me siento segura-

(sonrío con una ironía terrible, ya no podía más, me dispuse a largarme, de pronto me jalas antes de poder bajar las escaleras) (te acercas a besarme y trato de resistirme por la indignación, pero no puedo porque solo quiero besarte, siempre quiero besarte) (es ese pequeño paso de amor al odio, u odio al amor)

-¿porque me besas? ¿porque sí funciona cuando tu te acercas a mi? ¿porque no al revés?- (me callo y solo quiero besarte)

-así juego contigo-

-pues no deberías, me vas a perder, aun así te sientes insegura conmigo- 

-no es cierto- (vacilas un momento, y te alejas, yo te sostengo del brazo y te llevo hacia mi)

-estoy cansado, por la puta madre, estoy harto de pelear, quiero que estemos en paz, me demore porque estuve buscando un regalo para ti, para mañana, estaba en el centro comercial y ahí me llamaste, quiero que solo nos amemos como antes- (lograste que pise la barrera, me hiciste explotar finalmente, el dolor de cabeza comenzó)

(te acercas nuevamente a besarme, y me digo a mi mismo que tu eres mi mujer, mi amor, tu eres la persona para mi)

-me hubieras dicho, lo siento-

-se supone que era sorpresa, no importa, vamos a comprar, ¿si?-

-sacaré mis llaves, espérame-

Me calmo un poco, espero que naturalmente mi organismo se conecte con mi mente en proceso de relajación, parece que las únicas veces en que sentía más pasión por ti era cuando nos reconciliábamos de esa manera tan violenta, es raro y tonto, pero de algún modo adoraba eso.


DOS HORAS ANTES

Caminaba por el centro comercial, entrando a una joyería específicamente. Dando muchas vueltas. Contemplo un anillo de plata. Pregunto el precio. Para cuando estaría el grabado de letras. Pregunto si pueden tenerlo para mañana temprano. Pienso "¿será correcto regalarte un anillo? ¿espero un poco más? tal vez si pasamos la barrera de los dos años y medio sea mejor" Agradezco a la vendedora, le digo que voy a hacer una consulta y que luego regresaría.

Salgo de la tienda, me siento en una banca, trato de consultarme si será lo correcto, tal vez todo mejorará si lo hago, reforzaremos el amor, ya no pelearemos.

Me decido, me levanto de la banca aproximándome a la joyería nuevamente. Suena el celular. Me detengo a contestar. Eres tú.

-amor, ¿me acompañas a comprar?-

(a pocos centímetros de entrar al lugar) -esta bien, voy para allá-

Nunca pude comprar el anillo de plata.

(hasta el próximo beso arrebatado)



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